Helio Autran de Morais

MV, MS, PhD, DACVIM (Medicina interna y cardiología)

Prof.  titular y  director del  Hospital Veterinário

Oregon State University

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Los conocimientos relacionados con el SARS-CoV-2 siguen aumentando desde que se publicó el trabajo «El nuevo coronavirus y los animales de compañía» ¹, inclusive después de su actualización en el 11 de mayo del presente año ². El objetivo de la presente actualización es incluir las informaciones sobre el SARS-Cov-2 y los animales, que han aparecido entre el 11 y el 17 de mayo de 2020.

Gatos

^{Lo que ya sabemos ¹,²,³,}

Gatos jóvenes pueden infectarse experimentalmente por vía intranasal;

– Ocasionalmente los gatos pueden adquirir la infección de personas;

– El virus ya fue identificado en:

• Seis gatos, uno de los cuales no presentó signos clínicos;
• Cinco tigres, uno de los cuales era asintomático;
• Tres leones, todos con signos clínicos respiratorios;

Los gatos con el virus pueden tener o no sintomatología clínica. Los signos gastrointestinales y respiratorios ya se han relacionado con el SARS-CoV-2 en gatos;

– Los gatos eliminan el virus por vía nasofaríngea y rectal;

– Los gatos desarrollan anticuerpos neutralizantes;

– Los gatos jóvenes en condiciones experimentales pueden transmitir el virus para otros gatos, aún sin tener contacto directo.

Lo que sucedió la última semana

Infección experimental

Tres gatos domésticos con 15 a 18 semanas de vida fueron inoculados con SARS-CoV-2 por vía intranasal, intratraqueal y ocular 4. El virus fue detectable en muestras nasales a partir del primer día, y la eliminación viral duró hasta el sexto día postinoculación. Un día después de la inoculación, un gato sin infección previa por SARS-CoV-2 fue colocado junto a los gatos inoculados, en un total de 3 pares de gatos inoculado-susceptibles. Dos días después el virus fue detectado en una muestra de hisopado nasal en uno de los contactantes 4. Cinco días después, el virus fue detectado en los tres gatos contactantes. El virus no fue observado en los hisopados rectales de los contactantes. Ninguno de los seis gatos presentó signos clínicos y todos desarrollaron anticuerpos 4.

Ese estudio confirma la transmisión entre gatos por contacto directo